Mapa del Món

viernes, 20 de mayo de 2016

Mi nueva rutina en la comunidad de Primavera


A partir de las 6 de la mañana los primeros rayos de sol entran por las ventanas rotas del centro de capacitación, una habitación bastante sucia con 15 camas desordenadas; en una esquina, separada de las otras se encuentra la mía de la que  cuelga un mosquitero que sin querer, siempre me recuerda a una  cama de princesa.
Allí doy vueltas hasta oír como algún niño llama a la puerta y seguidamente observa por otra ventana lo que sucede en el interior. Cada día me asignan una casa diferente donde ir a desayunar, almorzar y cenar. Me levanto de golpe y detrás de una columna me visto rápidamente  ya que los niños  no dejan de mirar hasta que salgo afuera.
Cada día son niños diferentes, de distintas casas, así que empieza el diálogo más normal: ¿Cómo te llamas? ¿Cuántos años tienes? ¿A qué grado vas?¿De dónde vienes?¿Tienes mujer?¿Tienes hijos?¿Cuánto tiempo vas a quedarte?... Los niños aquí “agarran” confianza muy rápidamente y te cogen de la mano hasta llegar a su casa.
A menudo para llegar hasta la casa uno tiene que adentrarse por un pequeño caminito de barro y arena, esquivar algunos árboles o arbustos hasta poder ver las primeras paredes yonde el humo que se escapa por distintas aberturas del techo.
Algunas casas están hechas de cemento y ladrillo pero la mayoría son aún de madera con el suelo de arena, pero todas tienen bien diferenciada la zona de la cocina y la zona de dormitorio/s, afuera una letrina y algún sitio donde acumular agua para ducharse, lavar la ropa y los utensilios de cocina.
Después de presentarme a toda la familia y volver a responder casi siempre las mismas preguntas pido un poco de agua para lavarme la cara y las manos (ya que en el centro no hay agua) mientras me sirven el desayuno típico: tortillas de maíz con frijoles negros líquidos y algo de beber que puede variar entre un  café aguado o agua con harina de maíz. Algunas veces le acompaña un trocito de queso fresco no muy gustoso pero que se agradece bastante.

Cocina de una casa.


Niños de una de las casas.


Me despido de la familia y regreso al centro (voy a llamarle mi casa) rápidamente para preparar la mochila e ir hasta  la escuela de primaria.
Ando por los caminitos creados por las pisadas de la gente sobre el césped. Cruzo el centro de Bachillerato (que sólo está abierto por la tarde), un campo de palmeras y bajo la montaña hasta cruzar un puente que pasa por encima de un riachuelo para volver a subir hasta donde se encuentra el colegio.  A medida que voy acercándome, de distintos caminos parecidos al que sigo yo, van apareciendo niños o maestros en la misma dirección.
Este pequeño colegio tiene 4 construcciones de cemento con techo de chapa donde hay tres espacios (clases) separados por una pared que no llega al techo. En medio una pequeña pista para jugar con porterías de hierro sin redes. Fuera de este espacio cuadrado hay otra aula aún hecha de madera y con el suelo de tierra que  debe inundarse cada vez que llueve.
A las 8 en punto entro en la clase que me corresponde, clases numerosas de unos 35 niños están sentados en sillas de madera muy viejas. En las paredes cuelgan uno o dos murales con letras o números que se les están enseñando y una pizarra grande se encuentra al frente, detrás de la mesa del maestro.
Como cada día, me presento y salgo con la fila de niños a buscar a los de la siguiente clase ya que la Educación física la hacen a la vez las distintas clases  del mismo curso.

Foto del día de la clase con los maestros en el patio central de cemento.

Salimos del recinto escolar a un terreno más o menos llano que también hace la función de patio. Allí hacemos una sesión de una o dos horas de EF. Los niños están contentos ya que es algo diferente a jugar a pelota. Algunos de ellos vienen sucios, algunos con chancletas que dejan al lado de un poste antes de empezar la clase, otros mejor vestidos, pero para nada con ropa deportiva… En algunos momentos, sobre todo cuando estamos sentados, nos atacan las hormigas o los mosquitos del campo y créanme que duelen de verdad. En otros momentos es divertido ver como los niños y niñas salen corriendo a un lateral del campo, justo en la línea imaginaria que delimitan los conos (creados esos días con pelotas rotas por la mitad) empiezan a orinar con toda normalidad y sin ningún tipo de vergüenza.
A las 10h salgo del colegio y hago el camino de vuelta hasta quedarme en el diversificado (Bachiller) y charlo con un chico que realmente no sé que hace allí, quizás simplemente atiende a la gente.
Después de descansar allí un ratito salgo de nuevo hacia el sector 2, otra montañita que tengo que bajar y subir para cruzar el pequeño rio y salir a la otra parte de la comunidad donde después de caminar un poco llego a casa de Javier (un chico de 22años que hace algunas clases de computación y ha iniciado un curso de internet en su casa). Es una de las únicas casas que tiene el negocio de internet en toda la comunidad. Hablo con su familia y le ayudo a desgranar el maíz hasta que llegan (siempre tarde) los alumnos.
Cada día es un grupo de 6 alumnos diferentes así que siempre empiezo dando un monólogo aburrido sobre la suerte que tienen que Javier les ofrezca gratuitamente este curso y lo importante que es llegar puntual para aprovecharlo. Seguido de esto explico la sesión y después Javier reparte unos ejercicios para realizar.
Como puedes imaginar los maestros aquí no tienen ningún tipo de formación, simplemente son personas que estudiaron “universidad guatemalteca” en algún momento.
A las 12h salgo a paso rápido para regresar al sector 1, a veces con alguno de los alumnos, hasta llegar a la casa donde me toca almorzar. Esta es mi comida más rápida pero ya le he pillado el truco a comer con las tortillas los frijoles el huevo y/o la sopa. Así que a las 12:45 ya estoy de nuevo en el centro del diversificado donde ayudo a Javier u otro profesor en otras clases de “computación” hasta las 15h. A esas horas el sol ya está bien fuerte y las aulas con el techo de chapa se convierten en pequeños hornos que junto a los 40 alumnos hacen que todos salgamos empapados. Por suerte no hay ventanas y se puede respirar.



Niña de una de las casa que me hacia reír mucho.



Paso por mi casa a dejar la mochila y rehago el camino de nuevo al sector 2 a casa de Javier que me presta una hora al día el computador para hacer trabajos para la escuela, para la clase de Internet y que yo aprovecho a la vez para mandar algún correo.


Centro de capacitación (mi casa)




Mi súper estudio




A las 5 salgo al trote hasta el sector 1 donde me están esperando un grupo de jóvenes para entrenar a futbol. Hay días que el campo está ocupado y tenemos que inventar un espacio, otros días algunos chicos no pueden venir ya que están al campo trabajando o estudiando. Aún así entrenamos como podemos con 2 balones y 6 conos hasta que empieza a oscurecer.
Paso por mi casa para recoger algo de ropa y caminar hasta casa de Pedro, una de las primeras personas que conocí y que me ofrece su casa para bañarme en su recinto de agua. Por el camino me cruzo los trabajadores del campo que regresan solitarios con su machete en mano…es curioso que cuando se va el sol y las calles quedan oscuras la gene ya no se saluda al cruzarse (no sé por qué será). También escucho los anuncios que se gritan desde los altavoces para que toda la comunidad se entere (esto se hace varias veces al día…pero yo hasta la noche no le pongo atención). Uno de ellos siempre es para la familia que me tendrá que acoger al día siguiente, otros van desde oportunidades de compra, hasta donaciones para familias que están enfermas y no tienen recursos, reuniones, convocatoria de partidos de futbol… creo que cualquiera que quiera decir algo puede ir a avisar para que lo digan… Yo me rio bastante porque es gracioso oír al locutor con su mala forma de comunicación, repitiendo mil veces lo mismo, a veces dando la opinión de forma absurda…
Niños, hombres y mujeres nos juntamos en el recinto de agua, todo oscuro así que tengo que vigilar no meter los pies en el barro o cortarme con alguna piedra. Allí lavo la ropa con las mujeres, algunas me dan consejos de cómo hacerlo mejor, otras se deben reír por dentro.
Niños sacando agua del pozo (casa Pedro)

De cubo en cubo se va vaciando lentamente el gran recinto de agua y la gente se va bañando con el mismo jabón de lavar la ropa, todos medio vestidos. Para mí es un momento muy agradable del día ya que aún haber bajado el calor por primera vez me siento refrescado y limpio.







Recinto de agua donde limpio la ropa y me ducho cuando ya es de noche


De allí salgo a saludar alguna de las familias con las que me llevo mejor, ayudo a un chico a solucionar algunos problemas matemáticos y sigo hasta llegar a la familia que da de comer. A esa hora suele estar  la casa llena y eso siempre da para hablar más aún que los temas claves siempre son el calor, si en España hace la misma temperatura, que si me llamo como Piqué, que si les puedo mostrar una foto de la Shakira, que si me gustan las tortillas, el Barça y si he ido al rio.
Al terminar me despido y camino lentamente bajo la luz de la luna hasta mi casa que a esa hora parece ser sacada de una película de terror. Allí, casi sin luz, me meto dentro el mosquitero y me tumbo a la cama.



Mi cama








Cada día me siento igual de agotado pero al mirar la hora en el celular aún no marcan las 9 de la noche… me rio como si no me lo pudiera creer y me pongo algo de música. Escucho cuatro o cinco canciones que me traen buenos recuerdos aún que a veces también me producen algo de melancolía, me doy un tiempo para recordar y echar de menos mi lugar, mi casa, mi cama, mi familia, mis amigos, las cenas, caminar por las calles de Barcelona, la comida, la playa, el mirador de los bunkers… . Y es en este momento, cuando ya apago la música, cierro los ojos y me doy cuenta que todas esas cosas que echo de menos, sean pequeñas o grandes, son las que me importan más, las que cuando estoy a Barcelona me hacen sentir bien y por las que quiero regresar.









Con las niñas al rio!

jueves, 12 de mayo de 2016

Experiència a la comunitat Primavera de l’Ixcan - Esperiéncia a la Comunidad Primavera

Després de 9h de viatge des de la capital arribo al poble de Playa Grande d’Ixcan on només posar els peus a terra un senyor em toca l’esquena i em diu que m’estava esperant per anar a la comunitat.
Així doncs, amb el Pedro, pugem a un 4x4 taxista on estem de peu  amb deu persones a la part del pickup  ben agafats per no caure en cada sotrac del cotxe pel mal estat del camí de terra i roca.
Després d’una hora , arribem a la comunitat de Primavera on directament em porta a la direcció del diversificado. Allà conec el Feliciano, director d’aquesta branca que s’encarrega de l’educació de secundaria i batxillerat.
Decidim que em quedaré a casa del Pedro les dues primeres nits fins ubicar-me en un dels dos espais que tenen pels voluntaris i em designaran a  diferents famílies per anar a menjar un dia a cada casa.
Lacasa del Pedro està a  mig construir, és  de ciment i força gran doncs  va estar durant uns anys com  il·legal als Estats Units i va poder enviar diners fins que el van deportar.






A la casa hi viuen els seus 4 fills, un casat i amb un fill i la seva dona. Amb un dels fills i el Pedro anem a buscar uns sacs de blat quan ja és  quasi fosc del tot i aprofitem per tirar-nos al riu que passa a prop , el riu Chixoy que  sembla un riu cristal·lí tot i la poca llum. M’expliquen que cada dia les persones de la comunitat han de creuar-lo  per arribar a les terres d’agricultura que tenen a l’altra banda. Una barca de la comunitat per unes trenta persones i unes privades més petites descansen a la vora del riu.
De tornada a la casa fem bany de cubells per refrescar-nos de la calor sufocant i sopem els típics “frijoles liquids” les “tortillas” i suc, mentre el Pedro m’explica la seva aventura des que va sortir de Guatemala fins creuar la frontera  d’Estats Units.
A les 8 del matí , em reuneixo amb el Feliciano per mirar en quines classes puc ajudar als més grans. Una hora d’EF a la setmana i unes quantes més d’informàtica en diferents moments de cada tarda. Tot seguit arribo al centre de primària on fem una reunió amb tots els mestres i decidim que cada dia faré una sessió d’EF amb cada curs i el dilluns una classe informativa general pels propis mestres.
Per la tarda vaig a una reunió amb la CCPI (l’òrgan que dirigeix tota la comunitat) on em diuen on aniré a dormir i com s’organitzaran els meus àpats.



Passejo una estona veient com la gent juga a futbol i fa les seves feines fins tornar a casa del Pedro on rento la roba a mà, em  banyo  a cubells i explico històries d’aventures mentre sopo amb ells.
Durant el cap de setmana m’assignen dormir al “centro de capacitación” un centre per reunions i on també hi ha una sala amb llits per acollir uns 20 voluntaris. Tot i que el centre fa una mica de “yu-yu”, no disposa d’aigua i té  poca llum hi ha mosquiteres per dormir. Al segon pis col·loco una taula al passadís per treballar i des d’aquí puc veure un dels camps de futbol.
També m’assignen una família cada dia per anar a esmorzar, dinar i sopar. Després d’un matí preparant classes em passo la tarda amb la Luci,la Wendy i la Silivia al riu: filla i nebodes del Pedro. I abans que es faci fosc rento la roba i em banyo en el recinte d’aigua que té la família.
El diumenge passejo pel sector 2 de la comunitat, visito una església catòlica i una evangelista i després em reuneixo amb el Javier, el professor de 22 anys que intenta ensenyar informàtica a alumnes de 17 a 25 anys i a qui  donaré un cop de mà amb un parell d’assignatures. També desgrano blat de moro amb ell i la seva família i m’expliquen la seva experiència a la guerra i com han anat avançant fins el dia d’avui. Finalment acabo anant a una altra banda del riu a pescar amb alguns dels germans del Javier. Jo no aconsegueixo res de res però ells amb un petit ham lligat amb nailon i unes trampes amb botelles de vidre aconsegueixen treure uns  peixets que diuen que estan ben bons fregits.
També em dóna temps d’assistir una estona a una de les reunions obertes dels pares i professors del “diversificado”... força interessant tot i que no tinc clar que arribessin a cap decisió final. I abans de fer-se fosc jugo un partit de futbol amb un equip que es diu “unión juvenil” que tot i perdre em demanen si els puc entrenar durant els dies que estic a la comunitat.
Ja per la nit, després del rutinari bany i rentat de roba m’inviten a sopar ”temales” (també fets de blat) a casa de la mare de la dona del Pedro ja que és l’aniversari d’una de les seves filles.
El dilluns és el meu primer dia real de treball. De 10 a 12 realitzo una sessió teòric-pràctica amb els mestres de l’escola de primària. El cert és que la part teòrica (com sol passar) se’ls veu força avorrits a la majoria però a la part pràctica s’ho passen força bé, podem fer reflexions interessants i alguns encara volien seguir després de finalitzar el temps.
Després de dinar amb  la família corresponent (totes són molt agraïdes i després de trencar el gel pregunten i t’expliquen coses interessants) treballo una estona i torno a canviar-me de casa de nou a la del Pedro però en una altra habitació ja que a ell no li semblava bé que no tingués aigua en el centre. Igualment em quedo amb el meu súper despatx en el passadís del centre per treballar de dia.
A la nit, sopant, un dels fills que va a la universitat em demana consell per resoldre les equacions que li han encarregat de deures i sense adonar-me’n ja havia acceptat fer-li classes particulars una estona cada dia... ja no sé d’on treure el temps!!!!





El dissabte marxem d’excursió amb el Pedro, la Lidia i la seva filla petita Luci a la Laguna Lachua. Un llac que està dins d’una reserva natural a una hora i mitja de Primavera. Acompanyar-me es un esforç econòmic que la família realitza i és d’agrair.
Després de passar per Playa Grande per comprar menjar per endur-nos,  arribem a l’entrada del parc i comencem a caminar durant una hora fins arribar a un petit mirador des d’on es veu el llac d’aigua transparent que canvia de color verdós i blau més intens segons la profunditat. Allà parem a menjar i després fem camí 30min més fins arribar a l’únic punt on està permès banyar-se. Som dels primers en arribar pel que ens permet gaudirr al màxim d’aquest espai natural. Tot i haver la prohibició d’allunyar-se gaire de la costa degut a que hi ha cocodrils podem veure bancs de peixos i com, des de sota l’aigua, a uns 20 metres de la costa la “laguna” es fa profunda de manera sobtada com un forat sense fi. Realment sembla com si s’hagués creat degut a un meteorit però la falta d’informació que tenen i el poc interès científic que donen en aquetes àrees fa que sigui una incògnita.
Passada una estona arriben diferents grups d’estudiants i per mi perd una mica la màgia el lloc. Ja per la tarda fem camí de tornada amb l’últim 4x4 que va des de Playa fins a la comunitat. Allà un home mig begut recorda les seves experiències de la guerra i la seva aventura recent anant a treballar en camps de conreu dels “patrones” com el govern als aconsella que facin. “He ido a sufrir durante 6 meses, todo lo que cuentan es mentira” afirma mig plorant degut a l’explotació i males condicions en les que ha passat els últims sis mesos.


Ja a casa el Pedro em dóna  la beguda que destil·len a la zona i fins tard (12h) em segueix explicant històries de la guerra.
Diumenge se m’acumula la feina ja que dos equips femenins de futbol em demanen que les entreni... tot i no saber d’on treure les hores ja que a partir de les 19 és fosc i no hi ha llum,  trec el temps d’on no puc.
La rutina setmanal torna a començar, cada vegada amb més calor. Degut això, les classes a primària es fan una mica més feixugues a la segona hora, les d’informàtica acabem tots amb la samarreta ben suada i les altres classes  es realitzen sota l’ombra dels arbres.
Segueixo de casa en casa coneixent diferents famílies, les seves experiències i algunes paraules dels diferents idiomes que parlen.
El dijous per la tarda, el meu únic moment lliure un dels homes d’una família, Sebastián, em proposa que l’acompanyi a una comunitat veïna on ell treballa d’infermer. Passem em moto per camins de pedres ben complicats i a mesura que ens allunyem les petites comunitats es van veient més pobres que les de Primavera. Cases fetes de fusta amb teulada de fulla, escoles encara més precàries, centres de salut sense material...
Arribem a una altre comunitat a una hora en moto (San Juan Chactela) on el Sebastian m’ensenya la seva farmàcia privada (una barraca de fusta de 4 x 3 m2 com a molt però ja tenia més medicaments que “l’ambulatori” general i públic de la comunitat.
Seguit d’allà ens arribem al riu pròxim on hi ha petits salts d’aigua que es van endinsant muntanya amunt fins perdre’ls de vista. Allà mateix baixa la gent de la comunitat o de les cases veïnes a rentar la roba, refrescar-se de la calor, jugar amb l’aigua i banyar-se. Tothom es sorprèn de veure’m i no és d’estranyar doncs en aquestes comunitats tan allunyades ja no hi arriba ningú. De fet ningú parlava castellà sinó que únicament Quítxua.
Així que amb les paraules que el Sebastián m’ensenya saludo i m’acomiado de la gent com puc.
De tornada en  Sebastián m’explica que totes aquestes comunitats veïnes de Primavera formaven part de l’exèrcit... doncs eren els mateixos contra qui lluitaven no fa tants anys. Ell mateix com a guerriller n’havia matat alguns i li havien matat al pare a l’ inici de la guerra.
A la pregunta de: Com us sentiu o podeu conviure uns amb els altres? Simplement em contesta que és el que hi ha, que al començament els dos grups tenien por de moure’s sols ja que desconfiaven els uns dels altres,però que ara ja no. També m’explica que tota aquesta gent era molt inculta i que simplement els hi deien que havien de matar-los perquè sinó els matarien a ells i complien les ordres sense saber realment el per què ho feien.
Finalment també donem una volta per la comunitat de les Flores on la dona del Sebastián també té una altra mini farmàcia. Allà m’ensenyen l’escola que són quatre fustes i quatre làmines i m’expliquen que fa uns anys estava en una altra zona i que un terratrèmol la va destruir. El govern els va dir que els ajudava a reconstruir-la però que només hi havia fons per les làmines metàl·liques i el terra. La gent de la comunitat va pagar les làmines de fusta i la van construir... cada dia surt per les notícies els casos de corrupció política i els milions que  roben els polítics.
El cap de setmana aprenc a fer polseres, entreno a dos equips femenins i jugo un torneig de futbol 7 a les 11 del migdia on casi m’hi quedo de la calor que feia.
Una tarda vaig al riu amb el Xas, el fill del Pedro i després de jugar una estona a tirar-nos des d’una liana al riu, baixem amb una càmera de roda de camió inflada riu avall. Uns 40min de “tubbing” pel riu Chixoy relaxadament i amb unes vistes  naturals fantàstiques.
Una nit hi ha un incident a la comunitat ja que un noi roba un mòbil i l’enganxen. Oportunitat que em dóna a veure com s’organitzen en aquestes situacions ja que tenen un òrgan autònom per solucionar els conflictes sense haver d’anar a Playa Grande on ja s’aplica la normativa general del país. Així que m’expliquen que quan hi ha el conflicte s’avisen d’immediat als alcaldes de la comunitat que fan de jutges. En primera instancia valoren si el cas es suficientment greu per portar-lo a Playa o si poden fer-se’n càrrec ells. Tot seguit es presenten els fets i s’arriba a una solució ataconada. En aquest cas concret, com que havia succeït de nit es va decidir engarjolar el noi en una espècia de cela que hi ha al centre de la comunitat fins l’endemà per reunir-se i fer el “judici”.
Els meus tres últims dies els passo ben ocupat treballant, aprofitant el temps amb la gent i acomiadant-me de cada amic i família que m’havien acollit a casa seva.




L’últim dia, els membres principals de la CCPI, el director del diversificado i el de primària, junt amb la família del Pedro em preparen un sopar sorpresa per acomiadar-me, allà parlem una estona sobre la meva experiència, m’agraeixen tota la meva participació i esforç i em regalen un morrón (peça de roba estil bossa tradicional fet a mà) i un diploma!
Ja tard, acabo de fer la motxilla i vaig a dormir. Les sorpreses no han acabat! Ja que, 5min abans de les quatre (hora que m’havia d’aixecar) em desperten un grup de nois i noies amb guitarres cantant cançons de comiat, entre aquestes la de “Que tinguem sort” de Lluís Llach en català (que deurien  aprendre d’algun altre voluntari).

Un final molt emocionant que acaba amb grans abraçades i la meva  sortida  cap a Ciudad de Guatemala. Tot un altre dia de viatge llarg, pesat i calorós per arribar a casa l’Aida.




(Traducción Google) Después de 9 de viaje desde la capital llego al pueblo de Playa Grande de Ixcán donde sólo poner los pies en el suelo un señor me toca la espalda y me dice que me estaba esperando para ir a la comunidad.
Así pues, con el Pedro, subimos a un 4x4 taxista donde estamos de pie con diez personas a la parte del pickup bien cogidos por no caer en cada bache del coche por el mal estado del camino de tierra y roca.
Después de una hora, llegamos a la comunidad de Primavera donde directamente me lleva a la dirección del diversificado. Allí conozco el Feliciano, director de esta rama que se encarga de la educación de secundaria y bachillerato.
Decidimos que me quedaré en casa de Pedro las primeras dos noches hasta ubicarse en uno de los dos espacios que tienen los voluntarios y me designarán a diferentes familias para ir a comer un día en cada casa.
Lacasa de Pedro está a medio construir, es de cemento y bastante grande pues estuvo durante unos años como il • legal en los Estados Unidos y pudo enviar dinero hasta que el deportaron.
En la casa viven sus 4 hijos, uno casado y con un hijo y su mujer. Con uno de los hijos y el Pedro vamos a buscar unos sacos de trigo cuando ya es casi oscuro del todo y aprovechamos para tirarnos al río que pasa cerca, el río Chixoy que parece un río cristalino • lí pesar de la poca luz. Me cuentan que cada día las personas de la comunidad deben cruzarlo para llegar a las tierras de agricultura que tienen al otro lado. Una barca de la comunidad por unas treinta personas y unas privadas más pequeñas descansan en la orilla del río.
De vuelta a la casa hacemos baño de cubos para refrescarnos del calor sofocante y cenamos los típicos "frijoles líquidos" las "tortillas" y jugo, mientras Pedro me cuenta su aventura desde que salió de Guatemala hasta cruzar la frontera de Estados Unidos.
A las 8 de la mañana, me reúno con el Feliciano para mirar en qué clases puedo ayudar a los más grandes. Una hora de EF a la semana y unas cuantas más de informática en diferentes momentos de cada tarde. Seguidamente llego al centro de primaria donde hacemos una reunión con todos los maestros y decidimos que cada día haré una sesión de EF con cada curso y el lunes una clase informativa general por los propios maestros.
Por la tarde voy a una reunión con la CCPI (el órgano que dirige toda la comunidad) donde me dicen donde iré a dormir y como se organizarán mis comidas.
Paseo un rato viendo como la gente juega al fútbol y hace sus trabajos hasta volver a casa de Pedro donde lavo la ropa a mano, me baño en cubos y cuento historias de aventuras mientras ceno con ellos.
Durante el fin de semana me asignan dormir en "centro de capacitación" un centro para reuniones y donde también hay una sala con camas para acoger unos 20 voluntarios. Aunque el centro hace un poco de "yu-yu", no dispone de agua y tiene poca luz hay mosquiteras para dormir. En el segundo piso col • loco una mesa en el pasillo para trabajar y desde aquí puedo ver uno de los campos de fútbol.
También me asignan una familia cada día para ir a desayuno, almuerzo y cena. Después de una mañana preparando clases me paso la tarde con Luci, Wendy y la Silivia al río: hija y sobrinas de Pedro. Y antes de que oscurezca lavo la ropa y me baño en el recinto de agua que tiene la familia.
El domingo paseo por el sector 2 de la comunidad, visito una iglesia católica y una evangelista y luego me reúno con Javier, el profesor de 22 años que intenta enseñar informática a alumnos de 17 a 25 años y al que daré una mano con un par de asignaturas. También desgrano maíz con él y su familia y me cuentan su experiencia en la guerra y cómo han ido avanzando hasta el día de hoy. Finalmente termino yendo a otra parte del río a pescar con algunos de los hermanos de Javier. Yo no consigo nada de nada pero ellos con un pequeño anzuelo atado con nailon y unas trampas con botellas de vidrio consiguen sacar unos pececillos que dicen que están bien buenos fritos.
También me da tiempo de asistir un rato en una de las reuniones abiertas de los padres y profesores del "diversificado" ... bastante interesante aunque no tengo claro que llegaran a ninguna decisión final. Y antes de oscurecer juego un partido de fútbol con un equipo que se llama "unión juvenil" que a pesar de perder me preguntan si los puedo entrenar durante los días que estoy en la comunidad.
Ya por la noche, tras el rutinario baño y lavado de ropa me invitan a cenar "temales" (también hechos de trigo) en casa de la madre de la mujer de Pedro ya que es el cumpleaños de una de sus hijas .
El lunes es mi primer día real de trabajo. De 10 a 12 realizo una sesión teórico-práctica con los maestros de la escuela de primaria. Lo cierto es que la parte teórica (como suele ocurrir) se les ve bastante aburridos en la mayoría pero en la parte práctica se lo pasan muy bien, podemos hacer reflexiones interesantes y algunos todavía querían seguir tras finalizar el tiempo.
Después de comer con la familia correspondiente (todas son muy agradecidas y tras romper el hielo preguntan y te cuentan cosas interesantes) trabajo un rato y vuelvo a cambiarme de casa de nuevo a la de Pedro pero en otra habitación ya que a él no le parecía bien que no tuviera agua en el centro. Igualmente me quedo con mi súper despacho en el pasillo del centro para trabajar de día.
Por la noche, cenando, uno de los hijos que va a la universidad me pide consejo para resolver las ecuaciones que le han encargado de deberes y sin darme cuenta ya había aceptado darle clases particulares un rato cada día ... ya no sé de dónde sacar el tiempo !!!!
El sábado nos vamos de excursión con Pedro, la Lidia y su hija pequeña Luci en la Laguna Lachua. Un lago que está dentro de una reserva natural en una hora y media de Primavera. Acompañarme es un esfuerzo económico que la familia realiza y es de agradecer.
Después de pasar por Playa Grande para comprar comida para llevarnos, llegamos a la entrada del parque y empezamos a caminar durante una hora hasta llegar a un pequeño mirador desde donde se ve el lago de agua transparente que cambia de color verdoso y azul más intenso según la profundidad. Allí paramos a comer y después caminamos 30min más hasta llegar al único punto donde está permitido bañarse. Somos los primeros en llegar por lo que nos permite gaudirr al máximo de este espacio natural. A pesar de haber la prohibición de alejarse demasiado de la costa debido a que hay cocodrilos podemos ver bancos de peces y cómo, desde debajo del agua, a unos 20 metros de la costa la "laguna" se hace profunda manera repentina como un agujero sin fin. Realmente parece como si se hubiera creado debido a un meteorito pero la falta de información que tienen y el poco interés científico que dan en estos áreas hace que sea una incógnita.
Pasado un rato llegan diferentes grupos de estudiantes y para mí pierde un poco la magia el lugar. Ya por la tarde hacemos camino de vuelta con el último 4x4 que va desde Playa hasta la comunidad. Allí un hombre medio bebido recuerda sus experiencias de la guerra y su aventura reciente yendo a trabajar en campos de cultivo de los "patrones" como el gobierno a los aconseja que hagan. "He ido a sufrir durant 6 meses, todo el que cuentan es mentira" afirma medio llorando debido a la explotación y malas condiciones en las que ha pasado los últimos seis meses.
Ya en casa Pedro me da la bebida que destila • instalan en la zona y hasta tarde (12h) me sigue contando historias de la guerra.
Domingo se me acumula el trabajo ya que dos equipos femeninos de fútbol me piden que las entrene ... aunque no saber de dónde sacar las horas ya que a partir de las 19 es oscuro y no hay luz, saco el tiempo de donde no puedo.
La rutina semanal vuelve a empezar, cada vez con más calor. Debido esto, las clases en primaria se hacen un poco más pesadas en la segunda hora, las de informática acabamos todos con la camiseta bien sudada y las otras clases se realizan bajo la sombra de los árboles.
Sigo de casa en casa conociendo diferentes familias, sus experiencias y algunas palabras de los diferentes idiomas que hablan.
El jueves por la tarde, mi único momento libre uno de los hombres de una familia, Sebastián, me propone que le acompañe a una comunidad vecina donde él trabaja de enfermero. Pasamos me moto por caminos de piedras bien complicados y a medida que nos alejamos las pequeñas comunidades se van viendo más pobres que las de Primavera. Casas hechas de madera con tejado de hoja, escuelas aún más precarias, centros de salud sin material ...
Llegamos a otra comunidad a una hora en moto (San Juan Chactela) donde el Sebastian me enseña su farmacia privada (una choza de madera de 4 x 3 m2 como mucho pero ya tenía más medicamentos que "el ambulatorio" general y público de la comunidad .
Seguido de allí llegamos al río cercano donde hay pequeños saltos de agua que se van adentrando montaña arriba hasta perderlos de vista. Allí mismo baja la gente de la comunidad o de las casas vecinas a lavar la ropa, refrescarse del calor, jugar con el agua y bañarse. Todo el mundo se sorprende de verme y no es de extrañar pues en estas comunidades tan alejadas ya no llega nadie. De hecho nadie hablaba castellano sino que únicamente Quechua.
Así que con las palabras que el Sebastián me enseña saludo y me despido de la gente como puedo.
De vuelta en Sebastián me cuenta que todas estas comunidades vecinas de Primavera formaban parte del ejército ... pues eran los mismos contra quienes luchaban no hace tantos años. Él mismo como guerrillero había matado algunos y le habían matado al padre al inicio de la guerra.
A la pregunta de: ¿Cómo se siente o puede convivir unos con otros? Simplemente me contesta que es lo que hay, que al principio los dos grupos tenían miedo de moverse solos ya que desconfiaban unos de otros, pero que ahora ya no. También me cuenta que toda esta gente era muy inculta y que simplemente les decían que tenían que matarlos porque sino los matarían a ellos y cumplían las órdenes sin saber realmente el por qué lo hacían.
Finalmente también damos una vuelta por la comunidad de las Flores donde la mujer del Sebastián también tiene otra mini farmacia. Allí me enseñan la escuela que son cuatro maderas y cuatro láminas y me cuentan que hace unos años estaba en otra zona y que un terremoto la destruyó. El gobierno les dijo que les ayudaba a reconstruirla pero que sólo había fondos para las láminas metálicas • licas y el suelo. La gente de la comunidad pagó las láminas de madera y la construyeron ... cada día sale por las noticias los casos de corrupción política y los millones que roban los políticos.
El fin de semana aprendo a hacer pulseras, entreno a dos equipos femeninos y juego un torneo de fútbol 7 a las 11 del mediodía donde casi me quedo del calor que hacía.
Una tarde voy al río con el Xas, el hijo de Pedro y después de jugar un rato a tirarnos desde una liana en el río, bajamos con una cámara de rueda de camión hinchada río abajo. Unos 40min de "tubbing" por el río Chixoy relajadamente y con unas vistas naturales fantásticas.
Una noche hay un incidente en la comunidad ya que un chico roba un móvil y la pegan. Oportunidad que me da a ver cómo se organizan en estas situaciones ya que tienen un órgano autónomo para solucionar los conflictos sin tener que ir a Playa Grande donde ya se aplica la normativa general del país. Así que me cuentan que cuando existe el conflicto se avisan de inmediato a los alcaldes de la comunidad que hacen de jueces. En primera instancia valoran si el caso es suficientemente grave para llevarlo a Playa o si pueden hacerse cargo de ellos. A continuación se presentan los hechos y se llega a una solución ataconada. En este caso concreto, como que había sucedido la noche se decidió encarcelar al chico en una especie de celda que hay en el centro de la comunidad hasta el día siguiente para reunirse y hacer el "juicio".
Mis tres últimos días los paso bien ocupado trabajando, aprovechando el tiempo con la gente y despidiéndome de cada amigo y familia que me habían acogido en su casa.
El último día, los miembros principales de la CCPI, el director del diversificado y el de primaria, junto con la familia de Pedro me preparan una cena sorpresa para despedirme, allí hablamos un rato sobre mi experiencia, me agradece toda mi participación y esfuerzo y me regalan un morrón (prenda estilo bolsa tradicional hecho a mano) y un diploma!
Ya tarde, acabo de hacer la mochila y voy a dormir. Las sorpresas no han terminado! Ya que, 5min antes de las cuatro (hora de que me tenía que levantar) me despiertan un grupo de chicos y chicas con guitarras cantando canciones de despedida, entre ellas la de "Que tengamos suerte" de Lluís Llach en catalán (que deberían aprender de algún otro voluntario).
Un final muy emocionante que termina con grandes abrazos y mi salida hacia Ciudad de Guatemala. Todo otro día de viaje largo, pesado y caluroso para llegar a casa Aida

lunes, 9 de mayo de 2016

Retrobament amb la gent de Guate! Reencuentro con la gente de Guate!

01-04 -2016

Després d’un viatge una mica accidentat (hi ha un  problema tècnic que fa que just en el moment d’enlairar l’avió hagi de  retornar a la terminal, arribo a Guatemala i dedico els 10 primers dies a visitar a tots els coneguts de l’ última visita al país, tres anys endarrere.
M’instal·lo a casa l’Aida i la seva família que em fan sentir de nou com un membre més d’una família.
També la Karina i la seva filla petita Alicia m’acullen durant la major part del temps ja que la Karina té un horari més flexible com a instructora de Zumba. Així que en dues ocasions puc participar d’aquesta activitat.
Un altre dia vaig a dormir  a casa de la Maria que viu a les afores de la capital amb la seva mare i el seu fill.
Amb la família de l’Aida i de la Karina anem a un concert de música guatemalenca a un parc que es coneix per ser el lloc on es realitzen cerimònies de sacerdots maies i també hi ha algunes excavacions arqueològiques.
Una nit vaig a casa de la família de la Carolina i la seva cosina Estefania que celebrava el  seu aniversari i ens quedem fins ben tard xerrant i bevent.
Cada dia, sense realitzar res especial vaig acompanyant i vivint la vida de totes aquestes persones que sense dubtar un moment m’obren completament les portes ... fer encàrrecs, visitar familiars, anar al gym... Un parell de dies també em toca cuinar truites de patates ja que els fa molta il·lusió; en una ocasió m’instal·lo  a casa la Glòria, una veneçolana zumbera molt simpàtica que té  un apartament amb unes vistes molt bones de tota la ciutat i dels volcans Acatenango .
L’últim dia, també aconsegueixo quedar amb la Mayra, la Sílvia i l’Ariel a qui tenia ganes de saludar.
Uns dies molt bons on tots em cuiden super bé i em fan sentir com si hagués estat vivint allà els tres anys que he passat fora.







Divendres pel matí marxem amb el Frank (pare de l’Aida)  en direcció a Palència, una ciutat pròxima a Ciudad de Guatemala, on la família té la finca de vivers de les flors. Allà l’acompanyo amb un client a mostrar-li totes les parcel·les i el funcionament de la finca i després marxem camí a Rio Dulce de nou amun amic seu i el seu cunyat, com la última vegada.
5 hores de viatge amb un parell de parades fins arribar a la vora del riu en  la mateixa llanxa que feia tres anys havíem navegat.
Passem la tarda en el moll de la casa del Frank que recordava perfectament i que la última vegada estava en construcció.

Per casualitat, contacto amb l’Andrea, una amiga guatemalenca que viu al llac Atitlan (següent destinació) però que també està de cap de setmana al Riu. L’invitem a ella i al seu pare a sopar al moll i passem una molt bona estona tots junts fent copes sota el cel estrellat d’aquest lloc màgic.
A les 5 del matí ja estem preparant quelcom de menjar per sortir a pescar. Un cop tot preparat iniciem el viatge i torno a reviure una de les experiències més increïbles de tots els meus viatges: navegar a través d’aquest riu assentat a la punta de la llanxa amb els peus penjant, sentint tot l’aire a la cara i la llibertat absoluta, com si estigués volant. Passem pel canó de muntanyes plenes de vegetació, aus i peixos despertant i desembocant al mar infinit.
Aquest cop, a diferencia de l’última vegada, no ens quedem a pescar al mar sinó que ens allunyem costejant fins arribar i entrar al riu Sarstoon (que fa frontera amb Belice). Allà hi ha un petit poblet pescador on el Frank  coneixen alguns dels seus habitants. Allà deixem les bosses en l’únic lloc que lloguen habitacions i seguim riu amunt tirant la canya. Passem tot el dia amunt i avall fins pescar 7 peixots, també fem un bany refrescant i no parem de menjar i beure. Quan el sol comença a caure és un altre moment molt especial, d’aquests que et fan recordar el per què m’agrada tant viatjar i estar en llocs que a vegades semblen només trets d’històries d’aventures.
Cansats  de tot el dia, descansem fins tornar a sortir a primera hora per  provar sort amb la pesca una estona més, aquest cop al mar.
Abans de tornar cap a la casa del Frank (amb les neveres ben plenes de peix) passem una estona per la població de Livinstong on recollim a  l’Andrea i el seu pare.
Després d’una dutxa refrescant m’acomiado del Frank i la resta de la tripulació i canvio de cotxe en direcció a l’Atitlan (Panajachel) a casa la família de l’Andrea (9h de viatge).





Em desperto en una casa molt maca i molt gran que em recorda a un mas d’aquets catalans. Passo dos dies allà ajudant a l’Andrea en uns projectes d’arquitectura (com si fes de secretari), anem a comprar i visitar el mercat tradicional de la població de Sololá, anem en bici al voltant del llac Atitlan i a un mirador força maco on es poden veure els volcans del llac.
L’últim dia, abans de marxar cap al meu voluntariat, anem fins a la ciutat d’Antigua amb un company Americà d’una de les seves feines. Donem una volta per allà fent uns encàrrecs, suficient per recordar lo maca que és aquest ciutat colonial i, seguit, arribem a Ciutat de Guatemala on després de fer uns altres encàrrecs em quedo a casa l’Aida a passar la nit per agafar el bus de primera hora de la matinada en direcció al Ixcán.






01-04 -2016

(Trauctor Google) Después de un viaje un poco accidentado (hay un problema técnico que hace que justo en el momento de despegar el avión tenga que volver a la terminal, llego a Guatemala y dedico los 10 primeros días a visitar a todos los conocidos de la última visita al país, tres años atrás.
Me instalo en casa Aida y su familia que me hacen sentir de nuevo como un miembro más de una familia.
También Karina y su hija pequeña Alicia me acogen durante la mayor parte del tiempo ya que la Karina tiene un horario más flexible como instructora de Zumba. Así que en dos ocasiones puedo participar de esta actividad.
Otro día voy a dormir a casa de María que vive en las afueras de la capital con su madre y su hijo.
Con la familia de Aida y de la Karina vamos a un concierto de música guatemalteca en un parque que se conoce por ser el lugar donde se realizan ceremonias de sacerdotes mayas y también hay algunas excavaciones arqueológicas.
Una noche voy a casa de la familia de la Carolina y su prima Estefanía que celebraba su cumpleaños y nos quedamos hasta bien tarde charlando y bebiendo.
Cada día, sin realizar nada especial voy acompañante y viviendo la vida de todas estas personas que sin dudar un momento me abren completamente las puertas ... hacer encargos, visitar familiares, ir al gym ... Un par de días también me toca cocinar tortillas de patatas ya que les hace mucha ilusión; en una ocasión me instalo en casa la Gloria, una venezolana zumbera muy simpática que tiene un apartamento con unas vistas muy buenas de toda la ciudad y los volcanes Acatenango.
El último día, también logro quedar con Mayra, Silvia y el Ariel al que tenía ganas de saludar.
Unos días muy buenos donde todos me cuidan super bien y me hacen sentir como si hubiera estado viviendo allí los tres años que he pasado fuera.
Viernes por la mañana nos vamos con Frank (padre de Aida) en dirección a Palencia, una ciudad cercana a Ciudad de Guatemala, donde la familia tiene la finca de viveros de las flores. Allí la acompaño con un cliente a mostrarle todas las parcelas y el funcionamiento de la finca y después nos vamos camino a Rio Dulce de nuevo ar amigo suyo y su cuñado, como la última vez.
5 horas de viaje con un par de paradas hasta llegar a la orilla del río en la misma lancha que llevaba tres años habíamos navegado.
Pasamos la tarde en el muelle de la casa de Frank que recordaba perfectamente y que la última vez estaba en construcción.
Por casualidad, contacto con Andrea, una amiga guatemalteca que vive en el lago Atitlan (siguiente destino) pero que también está de fin de semana en Río. Le invitamos a ella ya su padre a cenar en el muelle y pasamos un muy buen rato todos juntos haciendo copas bajo el cielo estrellado de este lugar mágico.
A las 5 de la mañana ya estamos preparando algo de comer para salir a pescar. Una vez todo preparado iniciamos el viaje y vuelvo a revivir una de las experiencias más increíbles de todos mis viajes: navegar a través de este río asentado en la punta de la lancha con los pies colgando, sintiendo todo el aire en la cara y la libertad absoluta, como si estuviera volando. Pasamos por el cañón de montañas llenas de vegetación, aves y peces despertando y desembocando en el mar infinito.
Esta vez, a diferencia de la última vez, no nos quedamos a pescar en el mar sino que nos alejamos costeando hasta llegar y entrar al río Sarstoon (que hace frontera con Belice). Allí hay un pequeño pueblo pescador donde el Frank conocen algunos de sus habitantes. Allí dejamos las bolsas en el único lugar que alquilan habitaciones y seguimos río arriba tirando la caña. Pasamos todo el día arriba y abajo hasta pescar 7 Peixoto, también hacemos un baño refrescante y no paramos de comer y beber. Cuando el sol empieza a caer es otro momento muy especial, de esos que te hacen recordar el por qué me gusta tanto viajar y estar en lugares que a veces parecen sólo rasgos de historias de aventuras.
Cansados ​​de todo el día, descansamos hasta volver a salir a primera hora para probar suerte con la pesca un rato más, esta vez en el mar.
Antes de volver a la casa del Frank (con las neveras llenas de pescado) pasamos un rato por la población de Livinstong donde recogemos a Andrea y su padre.
Después de una ducha refrescante me despido de Frank y el resto de la tripulación y cambio de coche en dirección al Atitlan (Panajachel) en casa la familia de Andrea (9h de viaje).
Me despierto en una casa muy bonita y muy grande que me recuerda a una casa de estos catalanes. Paso dos días allí ayudando a Andrea en unos proyectos de arquitectura (como si hiciera de secretario), vamos a comprar y visitar el mercado tradicional de la población de Sololá, vamos en bici alrededor del lago Atitlán ya un mirador muy bonito donde se pueden ver los volcanes del lago.
El último día, antes de partir hacia mi voluntariado, vamos hasta la ciudad de Antigua con un compañero Americano de una de sus trabajos. Damos una vuelta por allí haciendo unos recados, suficiente para recordar lo bonita que es este ciudad colonial y, seguido, llegamos a Ciudad de Guatemala donde después de hacer otros encargos me quedo en casa Aida a pasar la noche para coger el bus primera hora de la mañana en dirección al Ixcán.